Sí, esa fue la conclusión a la que llegué cuando me di cuenta que existía la ciencia cognitiva y un montón de otros argumentos para explicar la enigmática presencia de fantasmas en nuestra vida. Sin embargo al darme cuenta de la inexistencia de estos no pude dejar de sentir curiosidad por los mecanismos que nos llevaban a ellos y fue así como llegué a la información que explicaba, por ejemplo, el fenómeno de la parálisis del sueño o el motivo por el cual antes de irnos a dormir podíamos ver sombras o personajes acechando nuestra cama. Todo siempre tiene que ver con la mente y la forma en que procesamos la información en ella.
El asunto es que independiente de que el tema de los fantasmas se explique completamente de forma científica y a través de fenómenos de percepción sucede que en la mayoría de los casos este tipo de experiencias paranormales son habitualmente calladas por miedo a parecer estúpido o en el peor de los casos, loco. Entonces me doy cuenta que a nivel cultural aún existe cierto sesgo a la hora de analizar estas experiencias lo que es contraproducente ya que en vez de hacerlas públicas y estudiarlas quedan aún con más fuerza incrustadas en un ambiente de superstición que tampoco ayuda mucho a resolver el espanto o el estrés que algunas personas experimentan con estas cosas. Siendo así creo que se hace necesario dar validez a estas experiencias para así permitir que el afectado se abra a contarnos lo que sintió o vivió. Si alguien nos cuenta que vio un fantasma, un gnomo o un ovni y lo primero que le decimos es que es un idiota o que está chalado, lo que hacemos es reprimir casi de forma automática un aspecto de la comunicación que es esencial para estudiar este tipo de fenómenos y aclararlos.
¿Aclararlos para qué? pues para que la persona deje de sentir miedo y entienda que lo que vio tiene una explicación plausible y totalmente racional. De seguro esa persona nos lo agradecerá porque en lo personal no he conocido a nadie que le haga gracia ver fantasmas y sombras misteriosas sin entender porqué. La luz del conocimiento en estos casos actúa como fuego que arde e ilumina no solo las habitaciones oscuras sino también la conciencia de las personas que luego más seguras podrán avanzar por la vida con otro talante, aprendiendo a dominar y comprender aquellos fenómenos fisiológios y cognitivos que aún estamos en proceso de descubrir.
Mis normas para hablar con alguien que dice haber visto un fantasma o cualquier otro fenómeno paranormal:
1- Jamás dudar de la persona: tú no estás ahí para juzgar su capacidad mental sino para confiar en que lo que dice es verdad, independiente de la explicación que luego tú puedas darle al evento. Si alguien vio un fantasma, un ovni o un gnomo comiendo un trozo de pan en la despensa la premisa es creer en su palabra. Tienes que entender que esa persona te está explicando lo que ha percibido sin entender ella misma lo que lo ha provocado.
2- Una vez que la persona haya contado tu experiencia calmarla y encontrar un momento adecuado para explicarle los motivos posibles por los cuales ha experimentado aquello. Aquí puedes incluir explicaciones personales derivadas de tu propia revisión del entorno para observar causas como incidencia de la luz, reflejos e incluso análisis de la personalidad de la persona o información científica relacionada al funcionamiento del cerebro y la forma en que nuestros sentidos nos pueden hacer trampas cognitivas.
3- Si la persona insiste en que lo que vio no es algo explicable de forma científica e insiste en que el familiar muerto que vio es su familiar, no insistir ni querer convencerla. Uno debe entender que independiente de la causa del evento la persona tiene sentimientos comprometidos y en ese caso podemos analizar su historial familiar y emocional para revisar si hay rasgos de depresión, melancolía o ansiedad que pudiesen estar produciendo estos fenómenos cognitivos producto del estrés. Aquí se suma la premisa del punto número uno con la sensibilidad y tacto que debes tener hacia la persona.
4- Cumplir con tu labor de contención y retirarte en el momento adecuado, entendiendo que las explicaciones que puedas entregar pueden ser o no bien recibidas. Recordar que al final será la propia persona la que decida recoger o no lo que tú le comentas para explicar el fenómeno que ha vivido, momento en el que tú quedas totalmente liberado de cualquier responsabilidad sobre ella y sobre lo que le suceda. Respetar en rigor, el libre pensamiento de la persona.
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2 Comentarios
Buenas noches desde el Norte de España.En primer lugar felicitarte por este gran blog que por arte de magia (guiño,guiño) acabo de descubrir,en estos dos años y medio que llevo aprendiendo en este camino de : aventuras,desventuras,historias de terror,amor,chalados,envidia y toxicidad.Me he animado a seguir leyendo tu blog,en primer lugar, por la forma que tienes de expresarte yposteriormente porque creo que es tán necesaria la visión de un amante del esoterismo,que haga una crítica basada en el entendimiento de los sucesos,desde lo racional,que a su vez lo combine con las ciencias físicas y que sobre todo sacuda el gran lastre que tiene el miedo la supersticción y la falta de conocimiento.A modo de resumen quería centrarme en tres puntos: para el primero,comentar que como pobre incauta que comienza en este mundo te debates entre un sentimiento contradictorio de : creo en todo,que pasada y terminas viendo tantas chaladerías que no te crees nada.Tras mi corta experiencia,he podido comprobar que el efecto de los rituales es muy complejo,depende de el conocimiento de quien los realice,conciencia,intención,práctica,método y sobre todo fuerza energética.He comprobado que si no estás bien protegido o en una actitud vulnerable si pueden llegar a dañarte energéticamente hablando.Como tu bien has mencionado,todo efecto energetico tiene una repercusión en el campo físico y si se logra manipular la energía con este fin se puede hacer.Respecto a los amarres,totalmente deacuerdo y como bién has dejado entrever en tus artículos lo que hace la magia negativa o considerada negra (ejemplo,amarre) es aprovechar la debilidad de la persona y su miedo para potenciar la intención del mago.Efectivamente creo que lo que es arriba,es abajo y si cultivas tu vida espiritual,sumado a una buena alimentación y te proteges es dificíl que te dañen,no obstante,es un tema muy complejo.A su vez y ya me meto en una cuestión moral que a mi particularmente me sigue hinchando la vena y me pone mala,pese a que una ya comprende eso de que ´´ el hombre es un lobo para el hombre´´ y que la desesperación,la envidia y la rabia lleva a hacer muchas cosas;pese a todo,¿que derecho tenemos a tratar de doblegar la voluntad de alguien,por puro egoismo?¿que derecho tenemos a tentar contra su libertad?.Por último,me ha sorpendido tu posición totalmente escéptica de los espíritus o seres del mas allá.Comentas que no existen como tales y que son una realidad mental que nosotros mismos construimos por los motivos y las circustancias que sean.Sin embargo, y me voy a los típicos ejemplos: una medium que da ´´un supuesto mensaje´´ de un fallecido a un familiar,aportando hechos concretos o fechas comprobables,sin que la propia consultante lo sepa.Aquí no podría darse ni un fenómeno de telepatía entre medium y consultante,ni de sugestión.¿Como lo explicarías?.Un saludo y muchas gracias por leer estas líneas.
ResponderEliminarHola. Primero, me alegro que el blog te resulte interesante y te agradezco la confianza que has tenido para contarme tu propia experiencia respecto al tema del esoterismo. Segundo y con respecto a tu última duda referida a los médiums te dejo un enlace en donde hablé justamente de ese tema.
Eliminarhttps://aquariantarot.blogspot.com.es/2017/11/los-mediums-y-canalizadores-son-unos.html
Sobre cómo es posible que alguien sepa cosas de otro, sean datos concretos o fechas comprobables sin mediación de espíritus ni muertos te dejo aquí otro enlace (te sugiero leer las tres partes del artículo):
https://aquariantarot.blogspot.com.es/2017/02/la-videncia-analizada-con-los-ojos-de_11.html
Saludos.